«YO CREIA» DE MAPFRE. O como tirar el posicionamiento a la basura.

Hola, soy la marca Mapfre y esta es mi graciocísima nueva campaña:

Argumento A:  Mapfre no es tan caro como piensas.  O sea, hasta ahora Mapfre era el líder: el que más oficinas y mejor atención te podía ofrecer.  Olvida todo eso.  Ahora somos baratos. 

Argumento B: Mapfre te hace reír.  O sea, que hasta ahora Mapfre era confianza, liderazgo, profesionalidad, respuesta.  Ahora somos simplemente tan cachondos como nuestra competencia:

Repito, tan cachondos como nuestra competencia:

Conclusión:   posiblemente acuciado por la deserción de clientes a productos más baratos (típica en todas las categorías en tiempos de crisis), Mapfre determina que la moda en publicidad de seguros es ser barato y cachondo.  O sea, el más gracioso se lleva a los clientes.

Adiós al liderazgo, adiós al valor añadido de ser el primero, adiós a las percepciones premium, adiós a las justificaciones para un sobreprecio. 

¿Es que nadie se da cuenta de que si alguien no quiere pagar tanto por nuestro producto, la mejor opción es darle más por el mismo precio, no menos por un precio que no nos corresponde como marca?