Moby, un primer espada de la industria musical que nos enseña a reconvertirla en algo viable.
No me duelen prendas al reconocer que las ideas de Moby me inspiraron enormemente no sólo para dar forma a nuestra web de Pop Up Musica sino para construir nuestro propio argumentario como empresa.
Moby es un músico de reconocido talento que apuesta por la autoedición, el enfoque "yo me lo guiso, yo me lo como". No es que aplauda su propuesta: es que no hay otra propuesta posible. Con la defunción del CD y los sistemas de reparto de derechos de autor estancados y cuestionados, el artista que desea vivir de esto debe recuperar el mayor control posible de su obra. En lugar de grabar un máster y cedérselo a un gigante discográfico que pagará las facturas de su promoción y distribución a cambio de quedarse con un trozo muy grande de un pastel cada vez más pequeño, Moby…
- compone él,
- graba él mismo todos los instrumentos (si le creemos, en un cuarto de su casa…),
- masteriza él,
- distribuye él (en su web Moby.com podréis adquirir toda su discografía)
- e incluso vende él las entradas a sus conciertos,
- es consciente de la importancia que tiene colocar su música al alcance de sus fans: por eso permite una generosa cantidad de descargas gratuitas y es un usuario más que avanzado en redes sociales. Cuenta con un millón de seguidores en Facebook.
De este modo recupera un total control sobre su obra y lo que es más importante desde el punto de vista económico, se lleva un mayor porcentaje de sus ingresos. Todavía encuentro artistas que empiezan, que se resisten a entender este enfoque: suspiran por las jornadas de estudio con facturas de 5 dígitos, hoteles de 5 estrellas y por desarrollar sus carreras sin moverse de casa y sin verle la cara a los fans. Aborrecen a las marcas comerciales y les entra urticaria con sólo mencionarles una colaboración de branded content.
Sin embargo, un tipo como Moby, que lleva 25 años encima del escenario y ha vendido más de 10 millones de copias de "Play", les enseña el camino a los que empiezan con todo lo que hace. Toca en directo una media de 70/80 veces al año, escribe él mismo en su Twitter, es capaz de componer la banda sonora de una película de James Bond, pero también de colaborar con numerosas ONG´s.
Hace un año y medio me di de alta en su newsletter mobygratis, la sección donde el artista de realiza la divulgación no comercial de parte de su contenido. Ayer recibí un mail donde nos cuenta su última colaboración: un proyecto con Vimeo (la plataforma de video on line que crece como un cohete: Vimeo ha superado los 10 millones de visitas mensuales en Estados Unidos, gracias a una apuesta por la calidad del contenido… cosa que quizá no diríamos de Youtube). Se trata de un concurso de videoartistas al que se une la agencia de publicidad Saatchi & Saatchi: el ganador será anunciando en la sección de "nuevos directores" del festival publicitario de Cannes este verano y tendrá derecho a trabajar en la agencia así como a colaborar en futuros videoclips de Moby.
El vídeo es un elemento fundamental en la experiencia del usuario on line. Nos sirve a los que creamos contenido para sustanciar nuestros argumentos y divulgar nuestras obras. Les sirve a los usuarios -gracias a tecnologías de búsqueda cada vez más eficientes, anchos de banda razonablemente buenos ya universalizados en los hogares occidentales y dispositivos portátiles que se unen a la experiencia-, para encontrar el contenido que buscan, allí donde quieren consumirlo y en el momento que les da la gana. Vamos, justo lo contrario a la televisión.
Moby sabe muy bien con quien se asocia y el impacto positivo que esta acción tendrá sobre el inminente lanzamiento de su nuevo trabajo "Destroy". Por su parte, Saatchi demuestra que al menos hay una gran agencia que pugna por desperezarse y encarar la era post-publicitaria intentando ganar algo de credibilidad en el terreno del contenido útil.
Mientras escribo este post, escucho "be the one", el primer single de "Destroy" que me acabo de bajar de forma gratuita de su web. Gracias a su generosidad (que más que de altruísmo tiene un gran trasfondo de visión de negocio), Moby ha conseguido que me interese por la compra de su nuevo disco, informe del mismo a todos sus fans, y al mismo tiempo divulgue la historia de su colaboración con Vimeo, perfeccionando esa simbiosis que siempre ha querido tener con el medio digital. Brillante.
Por cierto, acabo de ver que en su próxima gira por Europa va a Barcelona pero no viene a Madrid. Habrá que intentar solucionarlo…